de COOKIE a CÓCTELSPLASH...

El conocido CookieSplash, es un ameno y divertido ejercicio de la velocidad de obturación, dónde se congela el movimiento jugando con el explosivo líquido lanzando un objeto al recipiente de éste.

Se suele utilizar para publicidad de productos y variantes del café, incluyendo cafeterías y demás espacios destinados al consumo cafetero, que muchos pecamos de viciosos.

Traslado el concepto del CookieSplash al CóctelSplash, dándole otra visión y otra textura al líquido congelado.

Pasen y vean...

CON AYUDA DE FLASH Y LARGA EXPOSICIÓN...

Tratando el tema de los fisiogramas en clase, hemos visto varios ejemplos de artistas diversos, no por ello fotógrafos en sí. Entre ellos encontramos a Picasso, quien alrededores de los 50, empezó a dibujar con puntos luminosos capturados en fotografía como fisiogramas.

Para ello, también usaban la ayuda de un flash, con uno o varios disparos dentro de la exposición de la fotografía, quedando así capturado también tantas figuras y posturas de picasso como disparos de flash realizados durante la toma.

De esta manera no solo capuraban una imagen negra con una trayectória de luz sinó una imagen visible en su totalidad tanto del fondo como del fisiograma en sí.

Pongo una fotografía, que aún sin fisiograma muestra esa triple captura de movimiento en una misma imagen. Se consigue con una lenta velocidad de obturación ( "5, "10, . . . ) y tres disparos de flash durante esa exposición.

FISIOGRAMAS

Qué mundo el de los fisiogramas, o mayormente conocidos como Lightpainting . . .
Técnica de captura y registro de la trayectória de un punto luminoso en movimiento que nos abre puertas a la imaginación de una manera expectante.

Con un largo tiempo de exposición como por ejemplo "5, "8, "10, . . . y una apertura de diafragma de entre f/8 y f/22, y la ayuda de un trípode y una habitación a oscuras, conseguimos resultados como los siguientes . . .

BARRIDO

Seguimos practicando con las diversas posibilidades que nos ofrece el juego de las velocidades de obturación de la cámara. El barrido, consta en la captura del movimiento separando al sujeto del fondo, dejando así el sujeto nítido y el fondo movido y borroso. La técnica para conseguir un barrido es acompañar con la cámara la trayectoria del movimiento que ejerce el sujeto, manteniendo el punto de enfoque y encuadre durante toda la exposición.

La garantía de éxito será mayor si tenemos una distáncia focal larga y una velocidad de obturación entre 1/30 y 1/8.

Los resultados siguen siendo por lo menos, satisfactorios y vistosos.

 

MOVIMIENTO

Movimiento, que concepto más temporal.

El constante movimiento nos rodea a veces sin que se nos apodere esa sensación de velocidad, de fugacidad. Pensar en una pausa física e inamovible nos resulta imposible, en un stop como si de un mando a distancia dependiéramos. Y quizás, mentalizar ese paso del tiempo como si un dibujo se tratara, fotografiar mentalmente ese rastro que lo movible va dejando instantáneamente atrás, también nos resulta costoso.

La cámara lo hace posible. La cámara tiene la capacidad de congelar, de capturar el instante preciso. Puede -a la vez, según voluntad del fotógrafo/a-  dejar retratado el paso del tiempo fijando ese recorrido del movimiento, descongelándolo en pixeles.

Como todo, es un juego.  Un juego entre la velocidad de lo que queremos fotografiar, la dirección del sujeto, entre la distancia de la cámara a éste, entre nuestra mente y dedos quienes mandan a la cámara, una u otra velocidad de obturación.

A menos exposición, más congelación del sujeto.  A más exposición, más rastro de ese movimiento, más trayectoria recogeremos.

Resultados inquietantes, curiosos y complejos… un ejercicio personal dónde su propia lectura le hará entrar en movimiento por si sola.